Llegaste con las ultimas luces.
De la noche de San Juan.
Prendiendo de entusiasmo mis sueños.
Apagando mi soledad.
Eras nana en la noche de verano
cabeceabas sobre mi cama.
Recordándome que estabas.
Anunciando una pasión por llegar.
En las tardes mientras te esperaba.
Soñaba con mi primer beso.
Mi primer abrazo.
La primera vez de algunos actos,
mañana tan bellos.
¡Qué tardes de verano con mi pechocha!,
¡qué noches cansadas de abrazarnos,
de caricias y flirteos!
¡Qué amaneceres compartiremos ...!
Durante trescientos años, Henoc aprendió todos los secretos (del Cielo y de la Tierra) de los bene Elohím (‘los hijos de los Señores’). De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él.
Bienvenida
Páginas
jueves, 28 de junio de 2012
Llegaste amor
Publicado por
Eusebio Baños Gómez
en
10:24
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario